Apartaderos




Es un mágico poblado que goza de un estupendo clima frío por pertenecer a la extraordinaria región de Santiago de Los Caballeros de Mérida, específicamente en el páramo merideño. Este pueblo es también reconocido con el nombre de San Isidro de Apartaderos; está localizado a unos 58 kilómetros aproximadamente de la bella ciudad de Mérida en plena carretera trasandina a una altitud de 3.342 metros sobre el nivel del mar.

El panorama que envuelve a Apartaderos es realmente una fuente de inspiración, a tal punto de crear mitos o leyendas que han sido relatadas de generación en generación, entre ellos destacan el de las Cinco Águilas Blancas y el de La Loca Luz Caraballo. Las grandes casonas de tapia y tejados con amplios patios internos evidencian el estilo arquitectónico y decorativo de la época colonial.

Usted podrá deleitar su vista con las imponentes cúpulas que se localizan en la zona hacia el Llano del Hato, las cuales pertenecen al Observatorio Astronómico de La Fundación Centro de Investigaciones de Astronomía Francisco J. Duarte. 

Apartaderos adoptó su apelativo debido a los viejos senderos que en la época colonial guiaban hacia las ciudades de Trujillo y Barinas. Desde este punto podrán observar la Sierra de Santo Domingo, en donde usualmente en los meses de Julio y Agosto se hacen notar sus relucientes y blancos picos nevados.

Su principal actividad es la agricultura basada en sus tradicionales técnicas de terrazas o andenes, además del cultivo y artes de la flor. La localización de este poblado es prácticamente en la cima de la Serranía de La Culata, en el declive mejor conocido como Valle de Apartaderos.

Aún en ciertos sitios se puede observar un viejo sendero denominado como el Camino Real de Los Españoles, el cual fue recorrido por Simón Bolívar cuando retornó de Colombia y atravesó victoriosamente Los Andes de Venezuela en plena Campaña Admirable para finalmente llegar a la ciudad capital Caracas. 

SITIOS DE INTERÉS

El Monumento Luz Caraballo

Fue creado en honor al antiguo mito que relata el sufrimiento y la pérdida de la razón de una mujer andina debido a la imprevista ausencia de sus familiares más cercanos, particularmente su esposo e hijos. Al pasar por la famosa carretera trasandina los turistas podrán observar el monumento de la famosa protagonista de esta leyenda, Luz Caraballo.

La Casa de los Cien Techos

Se trata de una interesantísima casa de estilo colonial único, pues tiene la particularidad de poseer varios niveles en sus techos que generan una ilusión óptica y se perciben más techos de los que originalmente son, debido a una estratégica distribución arquitectónica enfocada en sus tejados.  

Es una excelente alternativa a la hora de conocer lugares importantes de los alrededores de Apartaderos; la Casa de Los Cien Techos está situada a unos 100 metros del Monumento de Luz Caraballo. En esta casa existe un pequeño pero interesante museo, donde los turistas podrán apreciar hermosas piezas en cerámica procedente de la mano de obra indígenas prehispánicas y coloniales que fueron halladas en los rincones del poblado. 

El Camino Real de Los Españoles y La Casa de la  Primera Misa

El Camino Real de Los Españoles es un histórico sendero que transitó el Libertador Simón Bolívar en compañía de su fiel tropa durante la Campaña Admirable cuando retornaba del hermano país Colombia hacia la capital caraqueña. 

En las cercanías de este camino se encontraba La Casa de La Primera Misa, localizada a la entrada de Apartaderos. Conforme a la tradición, Bolívar y sus leales hombres, escucharon misa en esta vivienda mientras atravesaban Mérida en dirección al camino de su Campaña Admirable. Se sospecha, que en ese entonces, el lugar servía de refugio para ocultar sus armas al dirigirse hacia Caracas.  

La Iglesia de Apartaderos

Este celestial templo fue ideado a comienzos del año 1937, se encuentra en plena entrada de Apartaderos. Al entrar en esta maravilla arquitectónica se puede apreciar inmediatamente el santo patrono, San Isidro, acompañado de sus bueyes y venerado por sus creyentes y humildes campesionos; también se encuentran majestuosas y hermosas obras antiguas.